Search
Close this search box.

Una poeta del movimiento

 

Hoy
conocí a un genio en el tren
como de seis años de edad;
se sentó a mi lado y,
mientras el tren
corría por la costa,
llegamos al océano.
el niño me miró y me dijo:
“el mar no es nada bonito”.

fue la primera vez
que me di cuenta
de ello.

Charles Bukowski

Conocí a un genio

En 1974, Charles Bukowski escribió con su singular y cruda pluma el poema “Conocí a un genio”. Más de cuatro décadas después, la reconocida artista visual Dara Friedman le inyecta una nueva vida a estos versos con su pieza de video arte titulada “Dichter” (“Poeta”). Nueva vida porque el poema es recitado en alemán haciendo honor a los orígenes de la realizadora.

“Es una selección de poemas recitados en diferentes idiomas. Con diferentes intensidades. Una específica para cada poema. Es mi trabajo más reciente y queríamos que formara parte también de esta exhibición”, comenta Friedman, sentada ante todos nosotros con los pies descalzos y entusiasmada por hablar sobre la retrospectiva más completa que hayan realizado sobre sus 20 años de carrera artística.

“Perfecto Extraño” reúne en el Perez Art Museum Miami el trabajo de esta artista cuya tendencia es el propio cine experimental del siglo anterior y que aprendió de la mano de Peter Kubelka, el cineasta austríaco. Cada una de las piezas exhibidas muestra el uso indudable de lo cotidiano como esencia narrativa, en donde la emoción se apodera de la acción y alcanza al espectador sin dejar oportunidad para pensamientos ni construcciones cognitivas.

Muy a pesar de esa gestualidad que luce espontánea en sus videos, Friedman expresa que planifica con pautas específicas cada situación, incluso los elementos técnicos que cuidadosa selecciona por adelantado desde “el trabajo de cámara, el tipo de película fotográfica y la estrategia de edición” hasta los detalles en la presentación de la obra –escala de las imágenes, el equipo de proyección, curaduría en el espacio físico-.

Friedman maneja un equilibrio entre temas de alta dosis de euforia y otros de una serenidad absoluta. La primera sección de “Perfecto Extraño” sumerge al público en un gran cuarto donde confluyen sus primeros trabajos en 16 mm en la década de los 90s; todos interactuando en luz y sonido dentro de una misma habitación y con el resultado de una intensidad de energía poderosa. La temática en la mayoría de estas piezas son de una violencia sonora compensada por una estética hipnotizante. “Bim Bam” (1999 – 16 mm) es una composición de dos films hechos con la cámara de costado y proyectados uno encima del otro, en donde una mujer cierra de golpe y con toda su fuerza la puerta de una habitación y en donde la luz del umbral que cruza y descruza es adelantada o seguida por el sonido del portazo en total desincronización. “Total” (1997 – Super 8 mm) es la destrucción metódica de un dormitorio y es proyectada en retroceso para la reconstrucción ordenada del lugar; de la ira a la purificación. “Latigando la pared” (1998 – Super 8 mm) expone una acción tan peligrosa como es el uso de un látigo pero sobre la pared, rasgando el empapelado y las capas de yeso. “Chrissy, Mette, Kristan” (2000 – 16 mm) tres mujeres en tres películas distintas desnudan sus atributos con una acción liberadora y retadora de abrir su blusa a tirones al tiempo que disparos recrean el sonido de los botones rasgados.

La siguiente parte de la muestra, cada video vive en un cuartos separados apoderándose por completo del espacio y buscando una intimidad con aquel que entra y se queda. El planteamiento en buena parte de estas piezas es la exploración del espacio público con el movimiento personal, privado, que Friedman desarrolla con músicos, bailarines, actores. Con “Musical” (2007 – Video HD) la artista registró a 55 músicos que interpretaban a todo volumen una canción especial para ellos en calles, subterráneos, cafeterías y plazas atestadas de gente que apenas se percata de ellos. En “Bailarines” (2011 – Video HD) 66 bailarines de múltiples y diversos estilos toman la ciudad de Miami como escenario hecho en blanco y negro y donde la música bailada se mezcla con los ruidos de la ciudad y la propia respiración de los bailarines, un homenaje que la artista hace a esta ciudad que le ha dado su hogar más de la mitad de su vida.

La exhibición estará hasta principios del mes de marzo de 2018 en el PAMM en Miami. www.pamm.org

Relacionadas

Suburbano Ediciones Contacto

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest
WhatsApp
Reddit