Pizarrones kurdos y neoyorquinos
Una docena de maestros carga sus pizarrones a cuestas por las montañas rocosas y áridas del Kurdistán iraní. Recorren un camino polvoriento entre laderas escarpadas
Una docena de maestros carga sus pizarrones a cuestas por las montañas rocosas y áridas del Kurdistán iraní. Recorren un camino polvoriento entre laderas escarpadas
Escribir es jugar con los amigos imaginarios que nunca tuve, poner todo en papel es solo el mero paso final. Se trata de vivir en
Por Carlos López-Aguirre Desde el relato de un gato que se mira en un espejo hasta una poesía dedicada a una madre, desde la historia
Una docena de maestros carga sus pizarrones a cuestas por las montañas rocosas y áridas del Kurdistán iraní. Recorren un camino polvoriento entre laderas escarpadas
Escribir es jugar con los amigos imaginarios que nunca tuve, poner todo en papel es solo el mero paso final. Se trata de vivir en
Por Carlos López-Aguirre Desde el relato de un gato que se mira en un espejo hasta una poesía dedicada a una madre, desde la historia