Una conversación con Gunter Silva, compilador del libro ‘Correo Privado’, Londres, 2023.
Una antología de crónicas sobre diferentes ciudades del hemisferio norte donde participan catorce escritores peruanos.*
¿Cómo y por qué surge en ti la idea de editar una antología de autores peruanos en el extranjero?
La idea de editar esta antología surge de una combinación de factores personales, literarios y sociales que desembocaron en este proyecto. Un proyecto que personalmente me resultó muy enriquecedor.
En primer lugar, como lector apasionado, amante de la literatura y expatriado, siempre he considerado que una de las funciones más poderosas de la escritura es la capacidad de construir puentes entre culturas, conectando a personas de diferentes lugares y orígenes. Siendo peruano, sentí la necesidad de explorar y difundir la voz de mis compatriotas y colegas escritores que, debido a diferentes circunstancias, han emprendido una vida en el extranjero, particularmente en Europa y los Estados Unidos.
Hay que tener presente que nuestra diáspora es una realidad concreta y significativa. Miles de peruanos han dejado el país en busca de nuevas oportunidades, tanto económicas como intelectuales; incluso por motivos políticos. Sin embargo, sus historias y experiencias a menudo quedan invisibilizadas o desconocidas para la mayoría. Es por eso que surgió en mí la inquietud de crear un espacio para que los autores peruanos en el extranjero puedan compartir sus vivencias y reflexiones a través de la crónica, un género literario que permite explorar y transmitir de manera vívida y personal sus experiencias en distintas latitudes.
Mi ideal era crear un espacio que dé voz a aquellos escritores que han migrado y han enriquecido su visión del mundo. De alguna manera, intentar abrir una ventana para la comprensión y el diálogo intercultural. El sueño es que esta antología pueda ser una oportunidad para explorar, compartir y reflexionar sobre el fenómeno de la migración, el viaje, su impacto en nuestra identidad. Sin olvidar, también, que un libro como este es una excelente herramienta para mapear la presencia y mostrar la diversidad geográfica de nuestros autores.
Gunter Silva es novelista y cuentista, ¿por qué decides apostar por la crónica?
A diferencia de la ficción, la crónica se basa en hechos y busca capturar la realidad desde una perspectiva personal y subjetiva. Decidí apostar por la crónica porque permitía, a este grupo de escritores, explorar eventos y fenómenos de la vida real desde una perspectiva más íntima. Necesitaba que los autores de la antología se involucrasen personalmente en los hechos y experiencias que estaban narrando. Pensé que eso podría agregar un sentido de autenticidad y conexión emocional con el lector. Me interesaba saber cómo los autores perciben las ciudades, los eventos que retratan y la voz que le ponen al otro, ya que de alguna manera, ellos también están desnudándose en esas crónicas mientras las escriben, puesto que cada testimonio siempre se ve influenciado por las ideas previas que acompañan al cronista. Por último, elegí el género de la crónica porque tuve la impresión de que ya abundan libros y antologías de cuentos que exploran las vidas de personajes migrantes, el viaje o la otredad.
¿Al recibir los textos, encontraste, más allá del carácter de extranjería de las crónicas, algún eje temático o mirada recurrente que persiga a estos escritores peruanos en distintos lugares del mundo?
Me sorprendió ver registros tan variados que van desde el tradicional libro de viajes, hasta la crónica policial, la experimentación narrativa o la alucinación poética. Pero respondiendo a tu pregunta: claro que sí, encontré un eje temático recurrente que persigue a estos escritores, más allá de su carácter de extranjería. Y muy aparte del sentimiento de extrañamiento y esa sensación de ser forasteros en tierras desconocidas que están presentes en varios de los textos, noté la presencia de un espíritu flâneur.
El flâneur es un concepto asociado a la figura del caminante urbano, alguien que se pierde por las calles de la ciudad, observa detenidamente su entorno y encuentra inspiración en los encuentros casuales y las experiencias cotidianas. Aunque en Lima u otras ciudades del país el escritor peruano no suele recorrer sus calles debido al caos del tráfico, la falta de áreas verdes y bulevares, o a la propia delincuencia. En Europa, en cambio, las ciudades parecen estar diseñadas para ser exploradas a pie y brindan un entorno propicio para la práctica del flâneur.
Al menos en cuatro o cinco crónicas, estos escritores llevan consigo la tradición del flâneur europeo y lo adaptan a sus propias experiencias y contextos culturales. Se sumergen en las calles, plazas y rincones de ciudades desconocidas, permitiendo que la vida urbana los envuelva y los inspire. A través de su mirada curiosa y atenta, capturan la esencia de estos espacios, transmitiendo al lector sus impresiones y descubrimientos; como son los casos, por nombrar algunos de Claudia Salazar, Grecia Cáceres, Julia Wong o Roxana Crisólogo.
Esta búsqueda de la experiencia urbana a través del flâneur puede ser un intento de encontrar un sentido de pertenencia en un entorno ajeno, de conectar con la ciudad y sus habitantes de manera más íntima. Al adoptar este enfoque, estas escritoras logran trascender la sencilla condición de forasteras y se convierten en narradoras de las calles y las historias que se desarrollan en ellas.
Vives en Londres hace más de veinte años, de alguna manera eres un outsider de la literatura peruana, pero a la vez eres un lector y conocedor de ella. ¿Qué elementos que la distancien o la acerquen, encuentras tú, entre la literatura escrita por los autores que participan en este libro, con la de los autores peruanos que no se han ido del Perú?
Los escritores peruanos que residen en el extranjero suelen plasmar en sus obras una literatura con un enfoque más cosmopolita. Esta perspectiva se ve influenciada por su experiencia de vida en otros lugares, que les brinda una visión más amplia y diversa del mundo. Al estar expuestos a diferentes culturas, perspectivas y realidades, estos autores tienden a enriquecer su narrativa con elementos globales. Además, al alejarse físicamente de su país de origen, pueden reflexionar sobre su identidad peruana de una manera más profunda y crítica, explorando temas como el desarraigo y la nostalgia en su literatura.
Asimismo, desde mucho tiempo atrás, los escritores peruanos -que residen o han residido en el extranjero- se ven influenciados por la literatura del país que los acoge. Un ejemplo destacado es Mario Vargas Llosa, quien ha mencionado en varias ocasiones la influencia de Gustave Flaubert en su obra. Vargas Llosa ha manifestado admiración por la precisión y el estilo literario de Flaubert, y esa influencia se puede apreciar en la riqueza y meticulosidad de la prosa en algunas de sus novelas. Otros casos son la influencia de Maupassant en Julio Ramón Ribeyro. O, la de Alfredo Bryce Echenique, cuya obra ha sido influenciada por la literatura inglesa. Bryce ha mencionado su admiración por autores como P.G. Wodehouse, Evelyn Waugh y Laurence Stern, y ha incorporado elementos del humor británico en sus escritos. La influencia de la literatura inglesa se puede apreciar en su estilo narrativo y en la ironía presente en muchas de sus obras. En autores más contemporáneos y que aparecen en la antología, Pedro Medina, por ejemplo, se ha enfocado en la escritura de novelas policiales, algo bastante extraño en nuestra tradición, porque en el Perú nadie le tiene fe a un policía ni a un detective. Es posible que esto esté relacionado con el gran consumo de ese género en el mercado anglosajón y su larga residencia en los Estados Unidos. O en el caso de Julia Wong, vemos como en su novela Mongolia, escribe como quien salta con una destreza de trapecista, espacios tan diversos como Ullán Bator, Berlin, Lima, Macau o Baden Wuettemberg. Pienso que todas estas influencias literarias extranjeras y geográficas se entrelazan con la experiencia personal de estos escritores peruanos autoexiliados.
De otro lado, entre los escritores peruanos residentes en el país, se puede observar una creciente tendencia hacia la narrativa fantástica. Este género ha ganado popularidad en los últimos años, y muchos autores peruanos han encontrado en él una forma de explorar la imaginación, la mitología y los elementos mágicos dentro de la realidad peruana. Esta inclinación hacia lo fantástico también puede estar influenciada por la rica tradición de mitos y leyendas en el país, que proporciona una fuente de inspiración para crear mundos imaginarios y seres extraordinarios. Además, he notado que algunos tienen una gran preocupación por la riqueza idiomática: la lengua viva, la oralidad popular, el habla regional. Tal es el caso de la novela corta «Los sacrificios de la carne» de Jhemy Tineo. Las peculiaridades lingüísticas y la cualidad oral de las historias resaltan la intensidad de las emociones y la conducta de los personajes, sumando un valor estético y creativo a su obra. Me interesa también esa reinvención de nuestros paisajes. La selva peruana, con su exuberante vegetación y su población alegre y amable, que a menudo se asocia con un entorno natural, pacífico y armonioso, con Jhemy Tineo se convierte en un territorio más oscuro y perturbador, presentando una realidad donde la violencia y el fervor religioso desempeñan un papel detonante en su relato.
¿Existe algún ecosistema literario de revistas, editoriales, aunque sea incipiente, que le permita a un autor hispanoparlante hacer una vida literaria en Londres? ¿Qué tanto interés despierta la literatura escrita en español en el Reino Unido?
La vida literaria en Londres es vibrante, siempre que sea en inglés. En cambio, la literatura en español en Londres recién está experimentando un crecimiento muy incipiente debido a varios factores. Para comenzar, la comunidad hispanohablante en la ciudad es relativamente chiquita en comparación con otras comunidades lingüísticas. Esto limita el alcance y la difusión de la literatura en español, ya que hay menos lectores potenciales y menos espacios dedicados a promover y celebrar nuestra literatura.
Además, la literatura en español tiene que competir por su traducción con las literaturas de otras lenguas que tienen una presencia más consolidada en el mercado editorial inglés. Yo tengo la impresión de que las editoriales y los lectores británicos suelen estar más inclinados a preferir obras escritas en inglés, lo que dificulta la visibilidad de los escritores hispanohablantes. Varios amigos británicos, que son grandes lectores de novelas, me cuentan que no suelen leer traducciones, a menos que se trate de un libro clásico, canónico.
Sin embargo, a pesar de estos desafíos, la literatura en español está emergiendo lentamente, gracias particularmente a los fondos de traducción que tienen países como España, México o Argentina, y a un grupo joven de traductores que están apostando por nuestra tradición. Además, existen pequeñas iniciativas y espacios culturales que difunden la literatura en español, como festivales literarios, encuentros de escritores, clubes de lectura o el mismísimo Instituto Cervantes. Estas comunidades literarias brindan un espacio clave para que los escritores hispanohablantes compartan sus obras, establezcan conexiones y encuentren un público interesado en la diversidad de voces que ofrece la literatura en español. Habría que agregar que muchas Universidades han empezado a ofrecer, con más frecuencia, programas de estudios hispánicos, conferencias y exposiciones que destacan la importancia y la riqueza de nuestra literatura.
* Escritores incluidos en la antología: Pedro Novoa, Luis Rebaza-Solaruz, Julia Wong, Claudia Salazar Jiménez, Mario Wong, Grecia Cáceres, Raúl Tola, Roxana Crisólogo, Alejandro Herrera, Juan Manuel Chávez, Pedro Medina, Jorge Coaguila, Jorge Cuba-Luque y Walter Lingán.
Correo Privado. ISBN 979-8386220273. 148 páginas. Editorial EODLC, 2023