La luz debajo…
«Allá adelante, en los días que se nos vienen, las personas serán sepultadas con vida dentro de otras. Y serán como
«Allá adelante, en los días que se nos vienen, las personas serán sepultadas con vida dentro de otras. Y serán como
Hace un par de días, en el aeropuerto de Toronto, una mujer sentada al lado mío me preguntó qué hago en la vida,
En la sala de control, Santiago llamó al conteo regresivo. En treinta segundos saldrían al aire. El veterano productor recordó por instantes los eventos que
* Tampoco funcionó el martes pasado así que no debería haberme tomado por sorpresa lo que pasó hoy. Me imaginaba la apatía del resto de
En la penumbra, vas con los brazos estirados. Cuidas no darte de cara con un mueble o tropezar con cualquier cosa. A tientas, cierras la
Febrero 1996 Tengo una sorpresa, me dijo mi papá. Esperé unos días antes de ir a la tienda Kodak a revelar la
Cuando regresaron del cine, no hablaron de la película que habían visto. Salvador estaba encerrado en un silencio de hielo que Sara no pudo romper
«Allá adelante, en los días que se nos vienen, las personas serán sepultadas con vida dentro de otras. Y serán como
Hace un par de días, en el aeropuerto de Toronto, una mujer sentada al lado mío me preguntó qué hago en la vida,
En la sala de control, Santiago llamó al conteo regresivo. En treinta segundos saldrían al aire. El veterano productor recordó por instantes los eventos que
* Tampoco funcionó el martes pasado así que no debería haberme tomado por sorpresa lo que pasó hoy. Me imaginaba la apatía del resto de
En la penumbra, vas con los brazos estirados. Cuidas no darte de cara con un mueble o tropezar con cualquier cosa. A tientas, cierras la
Febrero 1996 Tengo una sorpresa, me dijo mi papá. Esperé unos días antes de ir a la tienda Kodak a revelar la
Cuando regresaron del cine, no hablaron de la película que habían visto. Salvador estaba encerrado en un silencio de hielo que Sara no pudo romper