Un golpe de 25 watts
Una vez me perdí en Montevideo. La ciudad se levantaba atrás de los balcones dejando ver a unos bebedores de mate. La noche anterior habíamos
Una vez me perdí en Montevideo. La ciudad se levantaba atrás de los balcones dejando ver a unos bebedores de mate. La noche anterior habíamos
Una vez me perdí en Montevideo. La ciudad se levantaba atrás de los balcones dejando ver a unos bebedores de mate. La noche anterior habíamos