De los temas a los que suelo recurrir en mis ilustraciones, son las mariposas, solas o como complemento, las más representadas. Ese pequeño insecto de frágil apariencia es el motor que en muchas ocasiones pone en marcha la máquina de vivir. La ilusión que nos impulsa a acometer grandes empresas o que nos mantiene firmes y constantes en arduas tareas.
Se escribe en los libros que las mariposas se alimentan de las flores, que vuelan de unas a otras atraídas por los olores que estas desprenden.
¿Qué es lo que nos mueve a nosotros, los humanos? ¿De qué alimentamos nuestras ganas de vivir día a día?
Nada hay que se nos resista, por duro que sea, si lo emprendemos con ilusión, y también cualquier maravilla que se nos presente podemos verla restar en importancia si carece de ilusión.
Esto es lo que en mis dibujos representan las imágenes de mariposas, esos bichos raros con alas estampadas a cuadros como fundas de patchwork, que logran escapar de los agujeros negros, que hacen del encuentro una nueva aventura, o miran al mundo con la esperanza de encontrar algo que lo haga especial.
La curiosidad, se desprende de sus antenas y las invita a batir sus alas ante un posible deslumbramiento.
Mª Jesús Campos García
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