Nuestro contexto sociocultural actual exige la realización de este artículo con el fin de precisar algunos detalles sobre lo que es migración. Para abordarla como proceso discursivo es importante aclarar algunas definiciones de esta categoría como acontecimiento social. Para ello he tomado como referencia los términos clave esbozados por la Organización internacional de las migraciones (2006) que define sumariamente los principales enlaces del concepto en cuestión. He aquí los que son más relevantes:
Apátrida. Persona que ningún Estado considera como nacional suyo, conforme a su legislación. En ese sentido, un apátrida no tiene aquellos derechos atribuibles a la nacionalidad, como por ejemplo, en el contexto de la protección diplomática de un Estado en que el principio aplicable es que este solamente puede ejercer la protección diplomática en favor de sus nacionales. Por otro lado, este sujeto no tiene, además, los derechos inherentes a la condición de residente legal y habitual en el Estado de residencia temporal, ni el derecho al retorno, en el caso de que viaje.
Asimilación. Adaptación de un grupo social o étnico, generalmente una minoría, a otro. Esta categoría implica también la adopción del idioma, tradiciones, valores y comportamientos e incluso de cuestiones vitales fundamentales y la modificación de los sentimientos de origen. En términos generales, la asimilación va más allá de la aculturación.
Desplazados internos. Personas o grupos de personas que se han visto forzadas u obligadas a huir o dejar sus hogares o su residencia habitual. Esto, como resultado o para evitar los efectos de un conflicto armado, situación de violencia generalizada, violación de los derechos humanos o desastres naturales o humanos. Estos desplazados no han atravesado una frontera de un Estado internacionalmente reconocido.
Emigración. Acto de salir de un Estado con el propósito de asentarse en otro. Las normas internacionales de derechos humanos establecen el derecho de toda persona de salir de cualquier país, incluido el suyo. Solo en determinadas circunstancias, el Estado puede imponer restricciones a este derecho. Las prohibiciones de salida del país pueden deberse por mandatos judiciales, en la mayoría de casos.
Inmigración. Proceso por el cual personas no nacionales ingresan a un país con el fin de establecerse en él. Las causas y circunstancias en que se desarrolla pueden ser diversas.
Migración. Término genérico que se utiliza para describir un movimiento de personas en el que se observa la coacción, incluyendo la amenaza a la vida y su subsistencia, bien sea por causas naturales o humanas. Por ejemplo, movimientos de refugiados y de desplazados internos, así como personas desplazadas por desastres naturales o ambientales, desastres nucleares o químicos, hambruna o proyectos de desarrollo. En este caso, el traslado se hace necesario.
Migración laboral. Movimiento de personas de un espacio a otro con un fin laboral. Este proceso está por lo general regulado en la legislación sobre migraciones de los Estados. Algunos países asumen un papel activo al regular la migración laboral externa y buscar oportunidades de trabajo para sus nacionales en el exterior.
Migración ordenada. Movimiento de personas de su lugar de residencia a otro, respetando la legislación que regula la salida y el viaje del país de origen. Así también se respeta, en este proceso, el ingreso en el territorio del país de tránsito o receptor.
Migrante. Es preciso indicar que a nivel internacional no hay una definición universalmente aceptada del término «migrante.» Este abarca usualmente todos los casos en los que la decisión de migrar es tomada libremente por la persona concernida por «razones de conveniencia personal» y sin intervención de factores externos que le obliguen a ello. Así, este término se aplica a las personas y a sus familiares que van a otro país o región con miras a mejorar sus condiciones sociales y materiales, así como sus perspectivas y las de sus familias.
Migrante calificado. Se trata de un trabajador migrante que por sus competencias recibe un tratamiento preferencial en cuanto a su admisión en un país distinto al suyo. Por esas razones, está sujeto a menos restricciones en lo que respecta a la duración de su estadía en el país receptor, al cambio de empleo y a la reunificación familiar.
Migrante documentado. Migrante que ingresa legalmente a un país y permanece en él, de acuerdo al criterio de admisión. Su condición le legalidad le puede permitir mejores oportunidades frente a los demás.
Migrante económico. Persona que habiendo dejado su lugar de residencia o domicilio habitual busca mejorar su nivel de vida en un país distinto al de origen. Es preciso distinguirlo del «refugiado», quien huye por persecución, y del “refugiado de facto”, quien huye por violencia generalizada o violación masiva de los derechos humanos. También se usa para hacer referencia a personas que intentan ingresar en un país sin permiso legal y/o utilizando procedimientos de asilo de mala fe. Asimismo, se aplica a las personas que se establecen fuera de su país de origen por la duración de un trabajo breve, llamados «trabajadores de temporada» o “temporeros”.
Migrante irregular. Persona que habiendo ingresado ilegalmente o tras vencimiento de su visado, deja de tener status legal en el país receptor o de tránsito. El término se aplica a los migrantes que infringen las normas de admisión del país o cualquier otra persona no autorizada a permanecer en el país receptor. En otras circunstancias también puede ser llamado clandestino, ilegal, migrante indocumentado o migrante en situación irregular.
