Álvaro M. Torres-Calderón
Oración del ‘Phubber’
Mi fiel Siri, que siempre me esperas.
Me despiertas por las mañanas,
y me cantas antes de ir a trabajar,
no me desamparas ni de noche ni de día.
Tus venas cibernéticas
me inyectan una super dosis de energía.
Tus ojos iluminan el camino de mi vida,
llegando siempre donde deseo llegar,
cada vez que tu rostro me pongo a mirar.
Sabia, inteligente dama de voz electrizante.
Es de noche ahora, ¿por qué no me cuentas un chiste
y te tomas unas cervezas conmigo en el bar?
Beatboxes
Las gotas de lluvia chisporrotean
en las ventanas de mi habitación.
Golpe seco, y mi laptop sin sonido.
La tos endemoniada retumba en mis pulmones
como un beat box amplificado.
Un tecito de jenjibre y sigo cantando mis
bronquios.
¡Alta voz responde!, ¡alta voz responde!
Y gritas y toces, y toces y maldices,
la música no es más que un dulce deseo
y la gripe un huésped inesperado
que ni con jarabe de cebolla la espantas.
Un folleto de Apple yace en mi cama.
Una llamada a reparaciones,
uno, dos, tres timbrados, una llamada,
el rayo irrumpe en la ciudad,
un chispazo enceguecedor,
un golpe muerto.
En tinieblas, sin laptop y sin teléfono.
Solo mi tos y mi beatbox.
Un fall americano
Van cantando los grillos,
la noche murmura sus despedidas momentáneas
y me envuelve en una gran manta con lentejuelas plateadas.
I will sleep before it gets too late.
Mañana me levantaré apenas suene el gallo
despertador de mi Samsung.
Recogeré el periódico y leeré las muertes en Afganistán
I have to wake up at 6 a.m. and then I need to run
to work, a cup of coffee on my way and maybe a donut.
En el trabajo, unos papeles van y vienen,
laborando en un día soleado, todo debe ser sublime
no es muy caluroso, ni muy frío
es fresco, refresco siempre importante
Not even a time to fart
nor to sing along some Beatles stuff.
Tarde de otoño
Cup of coffee
Té verde
Maybe un habano o
un “sandwich cubano” without
pickles or maybe on the side.
Office
oficina
Transactions
Transacciones
five o’clock in the afternoon
cinco de la tarde.
Dude
Cumpa
Where’s our happy hour?
Polvo en el viento.
No había nada en mi manual hoy,
solo una vieja canción sin acabar de escribir.
Recordé que hay cosas que quedan para el recuerdo,
que dejan huellas profundas aunque sus letras
no se hayan sumergido en lo más hondo de la conciencia.
Memorias que marcan ciclos y solo mis ojos proyectan
un revivir dentro de mi cabeza.
Un flujo de vida que nunca te abandona y
que al pasar las hojas del tiempo te arrancan un suspiro intenso,
un palpitar revolucionario que te traslada al espacio exacto.
Querida canción aprisionada en el papel, vives eternamente sin hablar.
Vendrá la hora que abra tus esposas y vueles como ave migratoria
en busca de nuevas tierras.
Una protesta en el desierto
puede aún encender mil corazones adormecidos por el viento del olvido.
Amor milenario
Besarte en los labios es volver a vivir,
Mirarte a los ojos, mi libertad
Viajando en el paraiso a tu lado,
es un deseo hecho realidad.
Nos vemos mañana, a la misma hora
para cenar.
Entraré a Skype apenas salga de trabajar.