¡Salud!, por la Dorian Gray
Es un domingo frío y gris de febrero en Nueva York, uno de esos en que si no buscás andamios afectivos, algo se te puede desmoronar por dentro. Así…
Continuar leyendo
¡Salud!, por la Dorian Gray
Es un domingo frío y gris de febrero en Nueva York, uno de esos en que si no buscás andamios afectivos, algo se te puede desmoronar por dentro. Así…